Vaca Muerta sigue batiendo récords, pero la industria tarda en recuperarse

La formación Vaca Muerta sigue superándose en récord de producción de gas y petróleo. La actividad de shale oil tocó sus mayores niveles en septiembre, mientras que gas también viene con números altos desde hace un trimestre, con pico en agosto. Sin embargo, los especialistas son cautos en cuanto al impacto general sobre la actividad en el país. “Por supuesto que es bueno que haya subas en Vaca Muerta, pero eso no sirve si el resto de la producción nacional cae”, argumentan.

Los consultores privados más escuchados por la industria todavía ven una actividad general decreciente en gas y petróleo, por debajo de los niveles prepandemia. Pero prefieren no polemizar con el Gobierno.

La producción de gas no convencional de septiembre fue de 68,1 millones de metros cúbicos. “Así se alcanzó un máximo histórico por tercer mes consecutivo”, según la secretaría de Energía. El secretario Darío Martinez atribuyó la mejora al plan Gas.

“Durante agosto se registró un crecimiento interanual de la producción de gas no convencional del 30,9% mientras que el gas total lo hizo en un 7,9%. Comparando los datos con los arrojados pre pandemia la actividad sigue en alza: 3.8% más de gas total y 22% más de producción de gas no convencional que en febrero del 2020”, indicó Energía en un comunicado.

“Hay récord de etapas (de producción) y por ende hay un record de producción en Vaca Muerta”; dice Luciano Fucello, un especialista energético. “Se están produciendo 200.000 barriles de petróleo en Vaca Muerta. Es como el 40% de la producción total del país”, detalla. “Y con 45 millones de metros cúbicos de gas de Vaca Muerta, también es un porcentaje importante sobre el total país”, agrega.

Los “récords” de Vaca Muerta no reflejan la situación general del pais. Los mayores niveles nacionales se alcanzaron en agosto de 1998, con 830.000 barriles diarios (más del 40% que en la actualidad) y en 2004, la producción de gas fue de 145 millones de metros diarios, también 10% por arriba de la actual. En julio de 2019 también hubo producción de gas en la cuenca neuquina que incluso superó a la actual.

El alza en los precios de los commodities energéticos puede ayudar a una mayor producción. El barril de crudo está cotizando por arriba de los US$ 80. Ese precio pueden captarlo los exportadores, ya que la industria nacional tiene un acuerdo para comercializar el barril a un precio menor, para que las refinadoras puedan pagarlo con los actuales precios de los combustibles.

“Hay un atraso del 10 y el 12% en los precios, en un contexto donde todos los costos para el estacionero van en aumento. A raíz de este escenario, donde las petroleras no actualizan los valores, ocurre que luego dejan de enviar productos al mercado, principalmente en las de línea blanca, lo que produce esta situación de desabastecimiento” observa Gabriel Bornoroni, presidente de la cámara CECHA.

Argentina tiene que recurrir a importaciones de gas durante el invierno. En 2021, fueron de US$ 1.811 millones. Pero los precios del GNL (el gas líquido que se importa y luego se regasifica) eran inferiores a los actuales. Los países que están atravesando temporada de frío están pagando precios récord por ese GNL. Se desconoce qué pasará con los importes de ese producto cuando Argentina necesite importar, a partir de abril-mayo. A veces, se suele comprar en el verano.

Aunque el país podría producir más gas, no tienen ni donde almacenarlo ni como transportarlo a los principales. YPF tuvo un proyecto para regasificar en una barcaza exportadora en Bahía Blanca. Pero la actual gestión lo juzgo anti económico y decidió cancelarlo. Fue cuando el precio del GNL estaba a valores menores a los actuales.

El Congreso está tratando una ley de promociones a la actividad hidrocarburifera. El grueso del oficialismo la defiende. Los consultores creen que debiera darle más seguridad a nuevos inversores.

Fuente: www.clarin.com